ENCUENTRO DE ORACIÓN DE JUNIO DE 2024
TEXTO INTRODUCTORIO
Volvemos a
celebrar la oración que nos reúne al lado del Señor.
Cerramos el
mes de Junio tras celebrar el Día del Corpus, el Sagrado Corazón de Jesús y
multitud de festividades de santos y santas como San Antonio, San Juan Bautista
o los Apóstoles Pedro y Pablo, que nos han dejado testimonio de la superación
de los problemas y conflictos a través del amor a Cristo.
Ofrecemos
esta oración por todos aquellos que son capaces de afrontar los problemas que
la vida nos ofrece, por todos los que los que intentan superarlos, que ponen en
Dios su confianza y los enfrentan desde el crecimiento y la superación
personal.
Comencemos sin
perder la actitud con la que siempre venimos aquí.
LECTURAS: Santiago 1:2-4 (NTV)
«Amados hermanos, cuando tengan que enfrentar cualquier tipo de problemas,
considérenlo como un tiempo para alegrarse mucho porque ustedes saben que,
siempre que se pone a prueba la fe, la constancia tiene una oportunidad para
desarrollarse. Así que dejen que crezca, pues una vez que su constancia se haya
desarrollado plenamente, serán perfectos y completos, y no les faltará nada.»
MÚSICA:
Busca a Dios - José Daniel
https://www.youtube.com/watch?v=I6EjCmwuZWg
REFLEXIÓN: La roca en el camino.
En un reino lejano, hubo una vez un rey que colocó una gran roca en medio
del camino principal de entrada al reino, obstaculizando el paso. Luego se
escondió para ver si alguien la retiraba.
Los comerciantes más adinerados del reino y algunos cortesanos que pasaron
simplemente rodearon la roca. Muchos de ellos se quedaron un rato delante de la
roca quejándose, y culparon al rey de no mantener los caminos despejados, pero
ninguno hizo nada para retirar el obstáculo.
Entonces llegó un campesino que llevaba una carga de verduras. La dejó en
el suelo y estudió la roca en el camino observándola. Intentó mover la roca
empujándola y haciendo palanca con una rama de madera que encontró a un lado
del camino, después de empujar y fatigarse mucho, finalmente logró apartar la
roca. Mientras recogía su carga,
encontró una bolsa, justo en el lugar donde había estado la roca. La bolsa
contenía una buena cantidad de monedas de oro y una nota del rey, indicando que
esa era la recompensa para quien despejara el camino.
El campesino aprendió lo que los otros nunca aprendieron:
Cada obstáculo superado es una oportunidad para mejorar la propia
condición.
Esquivar los problemas, buscar «culpables» o simplemente quejarnos no
solucionará nada, y la «roca» seguirá estando allí. Afrontar los obstáculos,
actuar, esforzarse… es lo que nos hará crecer como persona.
Mover las «rocas» seguramente implicará esfuerzo, sufrimiento, capacidad de
análisis, constancia …y todo ello nos hará más fuertes y sabios. Superar los
obstáculos nos hace mejorar nuestra condición, crecer, evolucionar.
PREGUNTAS REFLEXIÓN:
-
¿Nos instalamos en la queja constante ante los problemas, ante la vida?
-
¿Se puede vivir evitando los problemas?
-
¿Nos damos cuenta de que, si no los afrontamos, nos estancamos?
-
¿Tenéis alguna roca en vuestro camino por mover?
- ¿Ponemos en Dios nuestros momentos difíciles y le ofrecemos nuestro
esfuerzo, comprensión y superación?
MÚSICA:
El valor de seguir adelante. Laura Pausini-Biagio Antonacci
https://www.youtube.com/watch?v=f6TgfEdIvPY&list=RDjNv9zgJHVoA&index=2
ORACIÓN FINAL: Oración a Jesús en tiempos difíciles.
“Baña mi ser con honestidad, que mi vida sea un resplandor de rectitud y de
felicidad, acorde a los principios de tu amor y de tu gracia.
Querido señor mío, quédate en mi corazón, con una unión tan íntima a la
verdad y a la entrega diaria hacia mis hermanos, que pueda servirles con agrado
y pasión, como quiera que sea tu voluntad.
Que mis acciones sean fieles a mi esencia de integridad y que quienes
entren en contacto conmigo puedan sentir en mí, tu presencia, para gloria tuya.
Hermoso padre, estoy dispuesto a recibir tu ayuda para librarme de los
defectos de mi carácter, de los cuales ahora me doy cuenta, son un obstáculo en
el camino de mi salvación.
Ayúdame a ser una persona honesta conmigo misma y a actuar con serenidad y
con justicia en todas las decisiones que tomé en mi vida.
Que mis pensamientos guarden coherencia con mi sentir y que tú estés en
medio de ellos. Ayúdame a irradiar la luz que proviene de tu santo espíritu,
aléjame de la corrupción, de la envidia, de la rivalidad, del rencor y de la
ira.
Señor, en estos momentos de angustia, quiero que seas tú el que actúe en mi
vida, y soluciones estos problemas que no he podido resolver:
Escucha mi oración, oh Señor Jesús, porque en mis fuerzas no está poder
resolver mis conflictos, en cambio cuando eres tú el que actúa en mi vida, todo
sale mucho mejor.
Señor, sé que en ocasiones me angustio porque en el mundo a diario hay
violencia, inseguridad, y otras duras situaciones que me hacen temer, que me
llenan de desesperanza, tristeza y angustia, pero hoy sé que cuando estás a mi
lado, la vida cambia, pues contigo puedo tener tranquilidad, sensatez,
paciencia y caridad, frente a las cosas que no puedo cambiar.
Ayúdame a perdonar y a olvidar las ofensas que me hacen y a alcanzar la
armonía, la fe y la paz que sobrepasa todo entendimiento.
De igual manera, te ruego que llenes de amor el corazón de mis hermanos y
me puedan perdonar por mis ofensas, las que hago consciente o
inconscientemente, pero que en alguna medida lastiman su ser.
Perdóname tú también por mis pecados y permíteme escuchar tu voz, para
hacer lo correcto, para salir de mi egoísmo y donarme a los demás
constantemente y sin reproches, porque sé que eso me llenará de verdadera
felicidad.
Padre eterno, guía mis acciones y mis palabras, para que mi vida sea de tu
agrado y sea para ti, un sembrador de esperanza, sinceridad y alegría”.
PADRE NUESTRO/AVE MARÍA/ GLORIA