29 enero 2023

27 enero 2023

25 enero 2023

UNA INVITACIÓN A LA CONVERSIÓN

Encuentro del Grupo de Oración. Enero 2023.

En la noche de hoy, hemos vuelto a celebrar la oración que nos reúne al lado del Señor.

Empieza un nuevo año y con él vienen nuevos propósitos y metas. Termina enero, un mes en el que cerramos las fiestas navideñas y hemos conmemorado el nacimiento de María Ana, fundadora de las Franciscanas. Además, hoy, estamos de aniversario pues son ya cinco los años que llevamos reuniéndonos a los pies del Señor de la Humildad cada último miércoles de mes.

Hemos reflexionado sobre el Evangelio y la conversión de uno de los mayores enemigos del cristianismo; Pablo de Tarso, y de la fuerza que Dios y el espíritu dispuso en él para llegar a ser el apóstol de Jesús. Ofrecemos esta oración por todos aquellos que se encuentran perdidos y hallen, como Pablo, el camino de la conversión en hombres y mujeres nuevos.

REFLEXIÓN:
Hoy, 25 de enero, se hace memoria de la "Conversión de San Pablo" (...) En el caso de Pablo, algunos prefieren no utilizar el término conversión, porque -dicen- él ya era creyente, es más hebreo ferviente y por ello no pasó de la no-fe a la fe, de los ídolos a Dios, ni tuvo que abandonar la fe hebrea para adherirse a Cristo. En realidad, la experiencia del Apóstol puede ser el modelo de toda auténtica conversión cristiana.

La de Pablo maduró en el encuentro con el Cristo resucitado; fue este encuentro el que le cambió radicalmente la existencia. En el camino de Damasco sucedió para él lo que Jesús pide en el Evangelio de hoy: Saulo se convirtió porque, gracias a la luz divina, “creyó en el Evangelio”. En esto consiste su conversión y la nuestra: en creer en Jesús muerto y resucitado, y en abrirse a la iluminación de su gracia divina.

En aquel momento, Saulo comprendió que su salvación no dependía de las obras buenas realizadas según la ley, sino del hecho que Jesús había muerto también por él -el perseguidor- y que estaba, y está, resucitado. Esta verdad, que gracias al Bautismo ilumina la existencia de cada cristiano, alumbra completamente nuestro modo de vivir.

Convertirse significa, también para cada uno de nosotros, creer que Jesús “se ha entregado a sí mismo por mí”, muriendo en la cruz y, resucitado, vive conmigo y en mí. Confiándome al poder de su perdón, dejándome tomar la mano por Él, puedo salir de las arenas movedizas del orgullo y del pecado, de la mentira y de la tristeza, del egoísmo y te toda falsa seguridad, para conocer y vivir la riqueza de su amor.

Queridos amigos, la invitación a la conversión, valorada por el testimonio de San Pablo, resuena hoy. El Apóstol nos indica la actitud espiritual adecuada para poder progresar en el camino de la comunión. “Ciertamente no he llegado a la meta -escribe a los Filipenses -, no he llegado a la perfección; pero me esfuerzo en correr para alcanzarla, habiendo sido yo mismo alcanzado por Cristo Jesús”.

Ciertamente, nosotros los cristianos no hemos conseguido llegar aún a la meta de la unidad plena, pero si nos dejamos continuamente convertir por el Señor Jesús, llegaremos seguramente.

La Virgen María, Madre de la Iglesia una y santa, nos obtenga el don de una conversión verdadera, para que cuanto antes se realice el anhelo de Cristo: "Ut unum sint". ”Que seamos uno”

PREGUNTAS REFLEXIÓN:
-¿Qué es para ti la conversión?
-¿En qué aspectos crees que debe haber conversión en tu vida?
-¿Estamos en una verdadera actitud espiritual de conversión?
-¿Nos autoengañamos con un concepto practico de la conversión en acciones puntuales y no profundas?
-¿Crees que Jesús se ha entregado a sí mismo por ti?

MÚSICA:
Yo me rindo a ÉL. Dami Rojas
https://www.youtube.com/watch?v=IpNddW_tCbA

ORACIÓN FINAL: Para pedir la gracia de la Conversión.
Aquí estoy, Señor, delante de ti, con mi presente y con mi pasado a cuestas; con lo que he sido y con lo que soy ahora; con todas mis capacidades y todas mis limitaciones; con todas mis fortalezas y todas mis debilidades. Te doy gracias por el amor con el que me has amado, y por el amor con el que me amas ahora, a pesar de mis faltas.

Sé bien, Señor, que por muy cerca que crea estar de Ti, por muy bueno que me juzgue a mí mismo, tengo mucho que cambiar en mi vida, mucho de qué convertirme, para ser lo que Tú quieres que yo sea, lo que pensaste para mí cuando me creaste.

Ilumina, Señor, mi entendimiento y mi corazón, con la luz de tu Verdad y de tu Amor, para que yo me haga cada día más sensible al mal que hay en mí, y que se esconde de mil maneras distintas, para que no lo descubra.

Sensible a la injusticia que me aleja de Ti y de tu bondad para con todos los hombres y mujeres del mundo.
Sensible a los odios y rencores que me separan de aquellos a quienes debería amar y servir.

Sensible a la mentira, a la hipocresía, a la envidia, al orgullo, a la idolatría, a la impureza, a la desconfianza, para que pueda rechazarlos con todas mis fuerzas y sacarlos de mi vida y de mi obrar.

Ilumina, Señor, mi entendimiento y mi corazón, con la luz de tu Verdad y de tu Amor, para que yo me haga cada día más sensible a la bondad de tus palabras, a la belleza y la profundidad de tu mensaje, a la generosidad de tu entrega por mi salvación.

Ilumina, Señor, mi entendimiento y mi corazón, para que yo sepa ver en cada instante de mi vida, lo que Tú quieres que yo piense, lo que Tú quieres que yo diga, lo que Tú quieres que yo haga; el camino por donde Tú quieres llevarme, para que yo sea salvo.

Ilumina, Señor, mi entendimiento y mi corazón, para que yo crea de verdad en el Evangelio, la Buena Noticia de tu salvación, y para que dejándome llevar por Ti, trabaje cada día con mayor decisión, para hacerlo realidad activa y operante en mi vida personal y en la vida del mundo.

Ilumina, Señor, mi entendimiento y mi corazón, para que yo me haga cada día más sencillo, más sincero, más justo, más servicial, más amable en mis palabras y en mis acciones.

Ilumina, Señor, mi entendimiento y mi corazón, para que Tú seas cada día con más fuerza, el dueño de mis pensamientos, de mis palabras y de mis actos; para que todo en mi vida gire en torno a Ti; para que todo en mi vida sea reflejo de tu amor infinito, de tu bondad infinita, de tu misericordia y tu compasión.

Perdona Señor, mi pasado. El mal que hice y el bien que dejé de hacer. Y ayúdame a ser desde hoy una persona distinta, una persona totalmente renovada por tu amor; una persona cada día más comprometida contigo y con tu Buena Noticia de amor y de salvación.

Dame, Señor, la gracia de la conversión sincera y constante.
Dame, Señor, la gracia de mantenerme unido a Ti siempre, hasta el último instante de mi vida en el mundo, para luego resucitar contigo a la Vida eterna. Amén.

Puede visualizarse completa en:
https://humildadvilladelrio.blogspot.com/p/grupo-de-oracion-hvmilitas.html

22 enero 2023

15 enero 2023

13 enero 2023

12 enero 2023

SE ABRE EL CENTENARIO FRANCISCANO


Hermanos "Paz y Bien"

El 7 de enero de 2023, se inauguró en Greccio (Italia) el primer acto sobre el "Centenario franciscano". 800 años que nos disponemos a celebrar de 2023 a 2026.

El centenario franciscano es un camino que hemos decidido emprender para que toda la familia franciscana en todo el mundo celebre el 800 aniversario de la Pascua de San Francisco y los acontecimientos culminantes de los últimos años de su vida. Dicho Centenario se ha dividido en 4 Centenarios, repartidos respectivamente en 4 años donde se podrá reflexionar y contemplar la Regla y la Navidad en Greccio (1223-2023), el don de los Estigmas (1224-2024), el Cántico de la Criaturas (1225-2025), la Pascua de Francisco de Asís (1226-2026).

Durante estos tres años, acercaremos la figura de nuestro Padre Francisco para que lo conozcamos en profundidad y nos ayude a ser "Humildes y sencillos". Será un tiempo para que la familia franciscana viva aún más su carisma y lo siga trasmitiendo con su particular estilo de vida.

08 enero 2023

07 enero 2023

EL SUBMARINO AMARILLO DE BELÉN


La noche mágica del 5 de enero volvió a regalarnos la estampa de la cabalgata tradicional por las calles de nuestro pueblo tras la pandemia. Y otro año más, nuestra Hermandad realizó la carroza del Belén; esta vez, inspirado dentro de un submarino guiado por la tripulación más especial, los niños de nuestra cofradía.
La Hermandad, quiso tener un pequeño homenaje a nuestro cofrade recientemente fallecido, Rafael Ruiz, apareciendo su nombre en le ángel del portal.
Agradecemos la participación de todos los niños y niñas que han sido los actores principales en la noche de Reyes. También a todas las empresas y personas que han colaborado, especialmente a Don Colchón.
 Por último, agradecer al Ayuntamiento la confianza que deposita en nuestra Hermandad.

¡Felices Reyes a todos!
 

03 enero 2023

LA HERMANDAD EN LA CABALGATA 2023

 

Otro año más, hemos realizado la carroza del Belén, que encabeza la Cabalgata del día más mágico del año. Los Reyes irán a un portal muy, pero que muy original.

01 enero 2023

31 diciembre 2022

FELIZ 2023

28 diciembre 2022

LOS SANTOS INOCENTES

Encuentro del Grupo de Oración. Diciembre 2022.

Hoy hemos vuelto a celebrar la oración que nos reúne al lado del Señor.

Termina el año y termina diciembre, un mes en el que hemos festejado la Inmaculada Concepción de María y, sobre todo, desde hace unos días, la Natividad de Nuestro Señor Jesucristo.

Pero en este caso, hemos reflexionado sobre el Evangelio y la festividad que celebramos hoy: los Santos Inocentes, tomando conciencia de la actitud de José y María ante los planes de Dios y el dolor del pueblo que sufre la perdida injustificada de los más pequeños

Ofrecimos esta oración por los santos inocentes de nuestro tiempo: por los no nacidos, y los que sufren indefensión en el mundo.

LECTURA:

Lectura del Santo Evangelio según San Mateo 2, 1-3.

«Levántate, toma al niño y a su madre, huye a Egipto y quédate allí hasta que yo te diga, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo». Palabra de Dios.

REFLEXIÓN: La fe y el realismo de José; los Inocentes y el dolor de las madres.

Con estas pocas palabras del Evangelio que hemos leído, el ángel despierta a José para que salve la vida del Niño Jesús. Quizá nos ha llamado la atención que esta vez el relato no comenzase por un consolador no temas; esta vez sí que hay motivos para temer porque lo que está a punto de suceder es dramático. Un rey, por envidia y miedo, busca a Cristo para matarle. Jesús encuentra enemigos siendo todavía un niño frágil.

José, sin embargo, no se deja dominar por miedo y despierta delicadamente a María. Ayer mismo han disfrutado de la visita de los Magos. El olor a incienso y el brillo del oro que les han regalado siguen llenando el lugar donde descansan. Y, sin embargo, ya es necesario escapar, salir sin llamar la atención.

Podemos aprender del contraste de esta escena evangélica, al no perder de vista las sufrientes circunstancias en las que Dios quiso hacerse Niño. «Contemplar el pesebre es también contemplar este llanto, es también aprender a escuchar lo que acontece a su alrededor y tener un corazón sensible y abierto al dolor del prójimo. Contemplar el pesebre aislándolo de la vida que lo circunda sería hacer de la Navidad una linda fábula que nos generaría buenos sentimientos, pero nos privaría de la fuerza creadora de la Buena Noticia que el Verbo Encarnado nos quiere regalar. Y la tentación existe».

En el corazón de María se empieza a hacer presente la profecía de Simeón: «A tu misma alma la traspasará una espada». La madre de Cristo se está acostumbrando a salir enseguida, sin precipitación, pero sin demoras innecesarias. Esta vez tampoco hay tiempo para despedirse.

¿Por qué Jesús es una amenaza para Herodes? María y José tal vez no lo entienden, pero no juzgan los planes divinos. No se rebelan. Rezan antes de salir para que Dios les proteja y les bendiga en este nuevo viaje. Las dificultades no les nublan la vista, aunque temen por el Niño.

A José, quizá, una vez más, le asalta la misma incertidumbre que en ocasiones anteriores: ante el embarazo de María, cuando partieron hacia Belén a pocos días de dar a luz, la falta de lugar en la posada y ahora la necesidad de huir en medio de la noche.

 «¿Habéis visto qué hombre de fe? ¡Cómo obedece! “Toma al Niño y a su Madre y huye a Egipto”, le ordena el mensajero divino. Y lo hace. ¡Cree en la obra del Espíritu Santo! El padre terrenal de Jesús ha asumido su misión y sabe que un minuto de retraso puede ser perjudicial. Contempla a María absolutamente abandonada en Dios y en él, así que deciden partir en medio de la oscuridad.

«San José fue el primer invitado a custodiar la alegría de la Salvación. Frente a los crímenes atroces que estaban sucediendo, san José –testimonio del hombre obediente y fiel– fue capaz de escuchar la voz de Dios y la misión que el Padre le encomendaba. Y porque supo escuchar la voz de Dios y se dejó guiar por su voluntad, se volvió más sensible a lo que le rodeaba y supo leer los acontecimientos con realismo. Al igual que san José, necesitamos coraje para asumir esta realidad, para levantarnos y tomarla entre las manos».

Por orden de Herodes, un pelotón de soldados sale de Jerusalén para «matar a todos los niños que había en Belén y toda su comarca, de dos años para abajo, con arreglo al tiempo que cuidadosamente había averiguado de los Magos». La entera ciudad de David se llena del quejido de unas criaturas inocentes y del dolor de sus madres. «Se cumplió entonces lo dicho por medio del profeta Jeremías: una voz se oyó en Ramá, llanto y lamento grande: es Raquel que llora por sus hijos, y no admite consuelo, porque ya no existen»

¿Cómo puede despertar tanta violencia una criatura indefensa? Esos niños han dado la vida por Jesús. Mueren sin saber siquiera que mueren. Sus madres ven truncadas aquellas vidas inocentes y no saben por qué. Aparentemente no hay explicación para este suceso; representa el sufrimiento a primera vista inútil e injusto de unos niños que sellan con sus vidas la verdad que aún no conocen. María quizá imagina a estas madres rotas por el dolor, sin lágrimas suficientes para llorar tanto sufrimiento. No lo entiende, pero sabe que tiene un sentido y posiblemente empieza a atisbar que los planes de Dios no saldrán adelante sin mucho sacrificio.

El lenguaje se queda mudo ante semejante sufrimiento. María lo acoge en su corazón y guardó ese recuerdo toda la vida. Aquellos Inocentes dieron testimonio de Cristo, no hablando, sino muriendo, como «primicias para Dios y para el Cordero». Quizá, con el pasar de los años, María encontró a alguna de aquellas mujeres de Belén. No sería fácil consolarla, pero seguramente tendría palabras para serenar y curar esos corazones: las vidas de aquellos Santos Inocentes se unirían a la de su Hijo.

PREGUNTAS REFLEXIÓN:

-         ¿Es nuestra actitud de fe como la de José? 

-         ¿Obedecemos los planes de Dios o nos resistimos?

-         ¿Cuáles son los santos inocentes de hoy?

-    ¿Cómo María, nos unimos al dolor de los que sufren la indefensión por el fanatismo, la barbarie de la guerra o cualquier tipo de violencia?

MÚSICA:

Navidad. Pablo Dazán-Cover.

https://www.youtube.com/watch?v=rP95D2qdW0I

ORACIÓN FINAL: Himno a los Santos Inocentes

Tanto al tirano le place hacer de su orgullo ley,

que por deshacer a un Rey un millar de reyes hace.

Por matar a un enemigo siembra de sangre Belén,

y en Belén, Casa del trigo, no muere un Rey, nacen cien.

Y así su cólera loca no puede implantar su ley,

pues quiere matar a un Rey y corona a cuantos toca.

La furia del mal así no puede vencer jamás,

pues, cuando me hiere a mí, estás tú, Señor, detrás.

Estás para convertir en corona cada muerte,

para decirnos que el fuerte es el que sabe morir. Amén.

PADRENUESTRO/GLORIA/AVEMARÍA

26 diciembre 2022

25 diciembre 2022

24 diciembre 2022

18 diciembre 2022

17 diciembre 2022